“ANTES de preocuparte por tener un buen corazón
preocúpate por tener bien las tripas
para agarrarle el gusto
de dejar todo atrás
en la lejanía
de las camas desarregladas
de las ventanas cerradas
de los teléfonos que nunca suenan
de los cobertizos donde mueren las fotografías
sin que nos quede de otra
más que aceptar
que las mujeres que fueron bonitas
ahora son viejas
amargadas, solitarias y achacosas
y que los hombres que parecían fuertes
están muertos
o viven solos
pidiendo dinero afuera de la iglesias
todos ahora tendrán un buen corazón
mejor que el mío
pero están cansados
tienen las tripas hundidas en el cuerpo
vacíos de intuición
vacíos de amor propio
vacíos de mierda
saborear la vida
quieras o no
a veces
es meterte cuchillo
y descubrir de qué estas hecho
mientras las golondrinas
llegan a besarte el rostro
y de paso
a sacarte los ojos
aprende esto rápido
y llegarás al final de tu camino
con tu alma entera
tan ardiente
tan tranquilo
tan empapado de placer”.
Manuel Vargas